Libros — 31 de agosto de 2014 at 22:00

«Cumbres borrascosas» de Emily Brontë

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Cumbres borrascosas , la única novela de Emily Brontë, es una obra que sorprendió y ha seguido sorprendiendo al lector a través de los tiempos, hasta llegar a nuestros días. Fue escrita a la edad de treinta años, a petición de su hermana Charlotte, entre octubre de 1845 y junio de 1846.

Charlotte se había sorprendido al encontrar inesperadamente unos poemas escondidos de su hermana Emily, a quien juzgaba huraña y retraída, y de la que jamás podría haber imaginado que albergara la fuerza secreta y el ardor que estos destilaban. De aquí partió la propuesta conjunta de las tres hermanas más jóvenes para escribir una novela cada una.

Cumbres borrascosas toma el nombre del caserío donde se desarrollará gran parte de la historia. La narración se inicia y quedará marcada en todo su recorrido por el tema central del amor imperecedero. Un amor que surge espontáneo, sin ser esperado, cocido a fuego lento, en las correrías de infancia por los páramos salvajes, entre Catherine y Heathcliff, una niña de buena familia y un huérfano recogido por el padre de ella. Este amor oculto, sigiloso y nunca expresado, pero cuyo magnetismo se nos tornará evidente en las primeras páginas, tendrá importantes consecuencias… Y estas sobrepasarán a los protagonistas, al verse obligados a elegir, ya crecidos, llegado el momento del ineludible encontronazo con las convenciones de la sociedad. Ambos personajes se verán contra la espada y la pared, forzados a tomar decisiones condicionados por su diferente posición social. Desde su escaso margen de maniobra, eligen; y ambos elegirán mal, atrayendo sobre sí mismos y sobre sus más allegados, el sufrimiento y las amargas consecuencias del amor traicionado.

A pesar de que vamos descubriendo los detalles de la historia a través de la mirada serena de Nelly Dean, la narradora principal y criada que sirvió en ambas casas en las que presenció todos los hechos, su relato va embriagando irremediablemente al lector y no le permitirá abandonarlo, en el creciente deseo de averiguar qué posible desenlace cabe ante semejante caída libre hacia el derrumbamiento físico y moral de la situación y de los personajes que la viven.

Emily Brontë desarrolla la historia con una habilidad y maestría desconocidas para su tiempo, e inesperadas para una escritora novel. La narración se desenvuelve con gran agilidad, sin dar tregua al lector ante el avance de los hechos, pero a la vez, le permite ahondar en detalles íntimos de la naturaleza humana a través de las reflexiones de Nelly, la criada. El texto va conduciendo al lector a cuestionarse sus propias nociones sobre la bondad y la maldad, sobre el amor natural frente al amor adulterado por la posición social, y en conjunto, arrojará luz sobre muchas de las paradojas y contradicciones que llevamosdentro.

Cumbres borrascosas se publicó en 1847, considerándose un fracaso entre la crítica y el público. Fue increpada y marginada durante décadas, ya que su estilo llano, apasionado y salvaje se apartaba por completo del imperante en la época, más refinado y conservador. Tuvo que esperar hasta mediados del siglo XX para alcanzar, por fin, el innegable y merecido puesto relevante que hoy en día ostenta entre los grandes clásicos de la literatura universal.

Cortesía de «El club de lectura El Libro Durmiente» www.ellibrodurmiente.org

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